Productores frutícolas piden un “dólar fruta” de 27 pesos
Los chacareros continúan en su reclamo por un “dólar fruta” para poder comenzar a salir de la fuerte crisis que atraviesa el sector.
La producción de peras y manzanas no solo está afectada gravemente en Río Negro y Neuquén, también en Mendoza. La economía regional no repunta y una de las soluciones que plantean los productores es un tipo de cambio diferenciado.
“La situación es de quebranto total por la manera distorsionada en que evolucionaron la inflación, los costos y el tipo de cambio en los últimos años, con diferencias de entre 10% y 15% entre cada uno. Perdemos mercados afuera y adentro”, le dijo al diario La Nación Carlos Zanardi, presidente de la Cámara de Productores de Fernández Oro.
Así, sostuvo la que explicó ayer a a esta agencia, y reiteró que “necesitaríamos un ‘dólar fruta’ de 32 pesos. Esta crisis sólo se corrige con un sistema diferencial de cambio importante. No pensemos de 32 pero al menos que equipare los 27 pesos. Todas las economías regionales tienen problemas y nosotros más porque exportábamos el 70% de nuestras peras y la mitad de la producción de manzanas”.
Zanardi agregó un dato. La mano de obra representa el 65% de los costos (de ese total 45% son rubros no salariales) y que durante el 1 a 1 el jornal equivalía a 11,60 dólares y hoy es de 30 dólares, “pero los trabajadores cobran poco, el problema es la distorsión que esto implica para una actividad mano de obra intensiva y exportadora”.
Por su parte, el presidente de la Federación de Productores de Frutas de Río Negro y Neuquén, Sebastián Hernández, describió que la temporada 2017 no fue buena por las bajas temperaturas y hubo una merma del 50%. De las 43.000 hectáreas que se cultivan en las dos provincias (37.000 en Río Negro), 18.000 tuvieron pérdidas.
“Se vienen cayendo muchos productores y se mantiene la cantidad de tierras -agregó-, por lo que hay un proceso de concentración. Aunque la mayoría vendemos a empacadores y algo al mercado interno, la reducción de las exportaciones y el aumento de los costos nos golpea fuerte. Pasamos en una década de producir 1,8 millones de toneladas anuales a 1 millón”.
Mendoza
El diario porteño también puso sobre el tapete la situación de la provincia de Mendoza, donde también hay problemas: en los últimos años la provincia perdió unas 25.000 hectáreas de manzanas; la exportación de peras bajó de 1,6 millones de cajas a 72.000; se erradicaron 700 hectáreas de cerezos y se perdió la posibilidad de embotellar unos 4 millones de botellas de sidra. Los cálculos integran el documento “El fin de la fruticultura de Mendoza” elaborado por la Cámara de Comercio y Agricultura de Tunuyán.
Para la entidad se “destruyó” un sistema productivo que incluía “galpones de empaques, frigoríficos, aserraderos, secaderos, sidreras, agroindustrias, metalúrgicas y transportes”. Mendoza fue la primera productora del país de cerezas, ciruelas y duraznos. “Hoy solo queda el recuerdo de una pujante actividad, ahora frente a una buena cosecha de duraznos no hay capacidad de para procesar la fruta”, indicó Alberto Carletti, presidente de la cámara.
ADN