El verano invita a disfrutar Río Negro
La diversidad de paisajes y actividades de calidad, desde la Costa Atlántica hasta la Cordillera de los Andes, son las estrellas de la temporada estival en la provincia.
El Gobierno de Río Negro convoca a turistas y residentes a vivir y disfrutar las maravillas naturales que tiene la provincia que van desde el paraíso marítimo en la Costa Atlántica, hasta la experiencia veraniega de la cordillera con sus lagos y montañas.
La Costa y sus encantos
Más de 200 kilómetros de arena y mar, donde decenas de playas con características únicas invitan a relajarse. Desde El Cóndor hasta Las Grutas el agua azulada, los altos acantilados, campos de dunas y bancos de arena ilustran el paisaje.
En el Golfo San Matías, Las Grutas ofrece diversión a miles de visitantes que llegan año a año dispuestos a pasarla bien en las aguas más cálidas de la región. Las extensas playas son ideales para disfrutar diversas actividades como gimnasia recreativa, juegos, bailes o largas caminatas en soledad donde el sonido de las olas se convierte en un fiel compañero.
Si lo que se busca es tranquilidad, a pocos kilómetros de allí el Puerto de San Antonio Este tiene para ofrecer aguas profundas, bordeadas por un manto de caracoles y conchillas. Para los amantes del mar es imposible perderse de disfrutar la cocina del Puerto sanantoniense y Las Grutas, basada principalmente en la explotación de los recursos pesqueros existentes en la zona, que abren paso a los más exquisito y frescos mariscos en los restaurantes locales.
El paraíso en la playa
A 150 kilómetros de Las Grutas se encuentra Playas Doradas, un lugar mágico y silencioso, ideal para descansar mientras se aprecia el mar en las doradas arenas que caracterizan al lugar y acentúan su color con cada puesta del sol, una posta irrepetible en la Patagonia Norte.
El balneario El Cóndor, portal de ingreso de la Patagonia Atlántica, se encuentra a 30 kilómetros de Viedma y cuenta con la Colonia de Loros Barranqueros más grande del mundo que musicaliza los amaneceres y atardeceres con su cantar. Allí, entre la desembocadura del río Negro y la Bajada El Faro, se conforma el lugar ideal para practicar una diversidad de deportes que van desde windsurf, kitesurf, canotaje y pesca de orilla o embarcada, hasta el lanzamiento en parapente desde los acantilados.
La belleza del paisaje veraniego
Aunque sean las grandes protagonistas del invierno, San Carlos de Bariloche y El Bolsón sacan a relucir sus encantos inigualables durante los meses de verano, cuando la montaña invita a los turistas a disfrutar tardes enteras en la naturaleza. Los bosques, lagos, ríos, cascadas y arroyos conforman el paisaje multicolor que se alza al pie de la cordillera, donde abunda el verde y el colorido de las flores.
Bariloche es un destino para disfrutar todo el año, con amigos o en familia, para aprovechar el silencio de la naturaleza o la oferta nocturna. También permite decidir entre una tranquila tarde de pesca o actividades de aventura como kayak, cabalgatas en el bosque, caminatas o travesías. El Lago Nahuel Huapi es uno de los grandes atractivos de la localidad lacustre que promete aire puro a orillas del agua cristalina.
En El Bolsón se destacan los senderos de montaña, ideales para lograr el equilibrio entre el bienestar del cuerpo y del espíritu. Allí los sabores patagónicos invitan a las personas a deleitarse con exclusivos y deliciosos platos regionales. Este pueblo de montaña está preparado para recibir a todo tipo de visitantes con infinitas aventuras, mitos, cultura y tranquilidad que son la garantía perfecta para unas gratas vacaciones.
Río Negro tiene una amplia oferta para vacacionar, que va desde la cordillera al mar, combina diversión y relajación, a la orilla del océano atlántico o al pie de la montaña. Los paisajes paradisíacos, la gastronomía regional y la abundante propuesta de actividades la convierten en un destino ideal para disfrutar con amigos y en familia.
