Reactivan la cría de truchas en el paraje Bella Vista del norte neuquino
El gobierno neuquino, la municipalidad de Huinganco y un productor privado firmaron un convenio para reactivar la piscicultura ubicada en el paraje Bella Vista, en el paraje conocido como “Piedras Meonas”. Este emprendimiento aprovecha un hermoso manantial natural para la producción de trucha, con el objetivo de ofrecer un producto patagónico genuino y de alta calidad para el turismo local.
El proyecto comenzó la semana pasada con la armonización de la planta y la siembra de 60.000 huevos de trucha, proporcionados por el Centro de Ecología Aplicada de Neuquén (CEAN). Luis Brea, responsable del emprendimiento, estimó que esta primera siembra permitirá una producción de entre 10 y 12 toneladas de trucha, con planes de expansión para alcanzar las 20 en el futuro.
La iniciativa busca posicionarse en un nicho de mercado diferente al de grandes productores como los ubicados en Alicura y Piedra del Aguila, en el río Limay, que manejan volúmenes de superiores a las 4.000 toneladas. El enfoque está en abastecer la zona local y potencialmente expandirse a otras áreas de la provincia.
Entre los productos previstos se encuentran la trucha fresca para plato y, a futuro, la trucha ahumada, recuperando una tradición local. Además, se contempla la posibilidad de involucrar a pequeños productores mediante un sistema de fasón, similar al utilizado en la industria avícola.
El proyecto incluye planes para instalar una planta modular de procesamiento in situ, garantizando la frescura del producto desde la crianza hasta su distribución. Esta iniciativa promete no solo impulsar la economía local, sino también ofrecer a los visitantes una experiencia gastronómica auténticamente patagónica.
El gobernador Rolando Figueroa destacó que “reflotar las ideas que han tenido gente pionera y visionaria para poder desarrollar esta región es fundamental en esta época. Tener la posibilidad de producir en las Piedras Meonas, un lugar extraordinario desde lo visual, con la temperatura ideal para la trucha de cordillera, nos va a permitir generar un producto de calidad donde la productividad marginal va a terminar beneficiando a toda nuestra región y especialmente a este proyecto».
Figueroa enfatizó el cambio de paradigma que representa este proyecto: «Hoy no produce, simplemente es mantener y tener un costo. Pasar a producir primero 10 toneladas y después ampliar esta capacidad de producción, sin lugar a dudas genera un beneficio, sin mencionar el valor agregado que se puede generar para la alimentación del turista».
«El turismo y la gastronomía han estado atados a la producción y a estos productos de calidad que podemos obtener desde el norte, con personas con experiencia, capacitadas y, fundamentalmente, que tienen un cariño muy especial hacia nuestra región», agregó.
“Hace muchos años esto lo tuvo la Municipalidad, pero lamentablemente cuando volvimos en esta gestión, nos encontramos que estaba totalmente abandonado. A partir de ahí comenzamos a trabajar con el Concejo Deliberante y hemos tomado la decisión de concesionar”, explicó el intendente de Huinganco, Luis Sepúlveda.
Sepúlveda destacó el enfoque de colaboración público-privada: «La idea es generar y brindar por fuera del estado, que la gente pueda trabajar con emprendimientos privados particulares y el Estado ir acompañando”.