La Comisión Nacional de Alimentos sesiona en Villa La Angostura
Se presentaron avances del Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos.
Con la presencia de autoridades nacionales y provinciales, Villa La Angostura es sede durante dos días de la 116ª reunión plenaria de la Comisión Nacional de Alimentos (Conal). Durante el encuentro se presentaron los avances del Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos, que a través de distintas acciones busca disminuir los 16 millones de toneladas que se pierden por año en la Argentina.
La apertura de la reunión, que comenzó ayer, estuvo a cargo del secretario de Agregado de Valor del ministerio de Agroindustria de la Nación, Néstor Roulet; la subsecretaria de Alimentos y Bebidas de ese organismo, Mercedes Nimo y la subsecretaria de Producción provincial, Dora Cortés. Del encuentro participan además representantes del ministerio de Salud de la Nación, el Instituto Nacional de Alimentos (INAL) y de las áreas de Salud y Producción de distintas provincias argentinas.
Cortés agradeció la elección de la provincia del Neuquén como sede del evento y destacó el trabajo mancomunado de los ministerios con las provincias en un tema tan determinante como son los alimentos. “Es de esperar que las conclusiones de estas jornadas nos lleven a transitar por un camino de alimentos más seguros y de menos pérdidas, teniendo en cuenta que hay tanta población que no accede a una buena y sana alimentación”, dijo.
Roulet, por su parte, explicó que “nuestro objetivo como Nación es pasar de ser granero del mundo a supermercado del mundo y en esto nuestra responsabilidad es muy grande. No pueden pasar dos o tres años para que un alimento sea inscripto en el Código Alimentario. Con la innovación y tecnología van apareciendo alimentos que ni imaginamos, por lo que necesitamos un sistema bien armado y se está trabajando en eso”.
En relación con el Programa Nacional de Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos, al cual la provincia del Neuquén adhirió en abril pasado, Nimo explicó que “apunta al bienestar de toda la población y desde nuestro lugar como ciudadanos y consumidores también podemos aportar nuestro granito de arena para reducir los 16 millones de toneladas de alimentos que se pierden y desperdician cada año en la Argentina”.
En este sentido, Roulet se refirió a distintas acciones -convenios con supermercados, modificaciones de normativas e impositivas- que tienen como objetivo bajar de esa cifra el 30 por ciento para 2025 y 50 por ciento para 2030, de acuerdo con compromisos asumidos ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).