En San Cayetano, la Iglesia advirtió por la «inflación asfixiante» que hace más inalcanzable el pan
Poli pidió “pensar en la cantidad creciente de hermanos y hermanas que se acercan cotidianamente a los comedores, en los adultos mayores que no pueden comprar sus medicamentos, en las familias cuyos ingresos son cada vez más insignificantes?”, y mencionó: “Como reza una canción: ‘No es posible morirse de hambre en la tierra bendita del pan’”.
El arzobispo de Buenos Aires pidió: “Dejémonos interpelar por la parábola, capaz de poner de manifiesto las actitudes solidarias y fraternas que nos permitan reconstruir esta Argentina que nos duele a todos”.