Mediación escolar: Ya hay 43 inscriptos para la primera etapa en Huergo
Continúan abiertas las inscripciones para el trayecto formativo en mediación escolar destinado a los establecimientos ESRN N° 34 y N° 140 de Ingeniero Huergo. Hasta el momento 43 personas de ambos espacios ya se anotaron.
Son 12 módulos en total que integran el plan de formación, en los que se incluyen -entre otros- contenidos teóricos sobre “Conflicto”, “Poder y autoridad”, “Comunicación”, “Negociación colaborativa”, “Rol y características del mediador/a” y “Herramientas metodológicas” de la mediación.
El ciclo de capacitaciones para docentes, equipos directivos y técnicos, se extenderá hasta noviembre y forma parte del convenio firmado en julio del 2021 por los jueces del STJ Sergio Barotto y Ricardo Apcarian y la gobernadora Arabela Carreras.
Involucra especialmente a la Escuela de Capacitación, la Dirección de Métodos Autocompositivos y el Centro de Planificación Estratégica del Poder Judicial, y al ministerio de Educación y Derechos Humanos de la provincia.
La formación completa tendrá encuentros presenciales y virtuales, además de actividades asincrónicas a través del Campus Virtual de la Escuela de Capacitación Judicial.
Los fundamentos del proyecto
El objetivo es que las personas adultas que trabajan en educación, una vez formadas en las herramientas de la autocomposición y la resolución pacífica de conflictos, generen en las aulas los escenarios de aprendizaje para que las y los estudiantes puedan vivenciar y naturalizar estas experiencias y abordajes, como una construcción hacia el futuro y más allá de su vida escolar.
“La Mediación Escolar puede convertirse en el recurso y la estrategia que facilite la elaboración de acuerdos entre pares y, desde los propósitos pedagógicos que la misma implica, instalarse como mecanismo y pauta de convivencia en el cotidiano escolar”, sostiene el proyecto entre sus fundamentos. Y agrega: “La formación de adultos/as en Mediación Escolar tiene como principal objetivo trabajar sobre nuevas estrategias para atender a la creciente conflictividad en la convivencia escolar, que deviene en ocasiones en escaladas violentas”. En paralelo, se pretende “superar las percepciones individualistas y patologizantes y sustituirlas por un entramado de intercambios en el escenario en el cual tiene lugar el conflicto; construyendo posibles resoluciones de modo colectivo”.