Buenas ventas en lana de productores de la Región Sur
Diez organizaciones de productores vendieron 256.000 kilos de lana a un precio de $306 y en el último período, el volumen logrado fue de $78 millones.
Diez organizaciones de productores de la Línea Sur vendieron 256.000 kilos de lana a un precio de $306 y en el último período el volumen logrado fue de $78.000.000, aportando al sistema productivo y financiero, entre margen diferencial e impuestos, $52.000.000 netos, según estimaciones oficiales.
Las 10 organizaciones que se encuentran distribuidas en la Región Sur son las Cooperativas Ganaderas Nueva Esperanza (Laguna Blanca), Peumayén (Pichi Leufú), Pichi Cullín (Corralito), Amulein Com (Comallo), Indígena y Calibui (Ingeniero Jacobacci); las Comunidades de Blancura Centro, Pilquiniyeu del Limay; la Sociedad Rural de Comallo y el Grupo de Ganaderos de Los Menucos.
Las ventas, que se realizaron a través de cinco licitaciones durante noviembre y diciembre de 2019 y enero, febrero y junio de 2020, obtuvieron un valor promedio global de USD 5,07 por kilo de lana, con una calidad promedio de 19,6 micrones (μm) de diámetro de fibra y 57% de rinde al peine.
«Estas organizaciones que nuclean a 385 pequeños productores ganaderos de la Región Sur, con el apoyo de distintas instituciones, lograron vender unos 256.000 kilos de lana a un precio de 306 pesos», señaló el secretario de Ganadería de Río Negro, Tabaré Bassi.
Es que la venta conjunta y organizada por parte de los productores ganaderos, “permite acceder más fácilmente a los mercados, y su promoción es clave y estratégica para la competitividad del sector», agregó Bassi.
En las licitaciones de lana confluyen el trabajo de las organizaciones de productores y el personal técnico de diferentes instituciones, como el Ministerio de Producción y Agroindustria, el Ente para el Desarrollo de la Región Sur, el INTA, Prolana y la Ley Ovina, quienes además brindan respaldo financiero, solventando gastos de logística, acondicionamiento y prefinanciación de esquila, entre otros.
Bassi explicó también que «la concentración de lana de pequeños productores en el marco de una organización, permite obtener escala comercial y vender en el mercado formal directamente. Esto no sólo redunda en mayores ingresos para sus familias, sino que también repercute en la economía regional, a través de la compra de alimentos, ropa, materiales para refacciones, inversiones prediales y habitacionales, repuestos para el automotor, servicios, contrataciones, etc».
Además, el carácter organizativo de las ventas, permitió afrontar el escenario negativo que por factores multi causales atravesaba el mercado lanero internacional, sesgado a la baja, y la situación de pandemia conocida por todos.
El precio neto de bolsillo de $306 por kilo, un 70% al valor promedio de acopio regional, situado en 180 $/kg, representando para el productor un diferencial por kilo de $126.
Sobre el volumen total comercializado, se deducen $32.201.145 como margen diferencial contra el precio de acopio. A su vez, el carácter formal de este canal comercial, contra la informalidad de las ventas locales, permite un aporte impositivo total de $18.931.901.