Ailén Lascano Micaz, la primera rionegrina en nadar la Milla Helada
La joven oriunda de Viedma, Ailen Lascano Micaz, conocida por ser nadadora de aguas heladas, se convirtió en la primera rionegrina en completar el desafío más extremo de la disciplina: la Milla Helada.
Completó la prueba en 28 minutos, 56 segundos. La competencia está bajo la regulación de la International Ice Swiming Association (IISA) y consiste en nadar una distancia de 1.609,34 metros en aguas con temperaturas inferiores a los 5°C y sin ningún tipo de protección térmica.
«Conocí este desafío cuando fui a participar de una competencia del campeonato de aguas frías en Ushuaia en el 2018 , y desde ese momento me lo planteé como uno de mis objetivos y comencé a trabajar muy duro para poder lograrlo”, señaló Ailén Lascano Micaz.
«Desde el año pasado estoy participando de las competencias internacionales en aguas heladas y nadando en ellas varias distancias e inclusive la más extrema en competencia que es un kilómetro. Dos veces nade con aguas a 0 grados esa distancia, y otras cinco con el agua entre 1 y 4°C. Esta experiencia me motivó más a hacer realidad este evento y entrenar más intensamente para ello. Por que no se trata solo de hacerlo, sino que hacerlo y llegar bien, que la recuperación sea buena y rápida. Todo esto te lo da el entrenamiento y bueno, los últimos dos años prácticamente no tuve verano. Cuando vuelvo a la Argentina ya empieza el otoño así que es momento de entrenar en las aguas frías del río Negro.” comentó.
El desafío lo llevó a cabo en una pileta construida en un lago llamado Wöhrsee, ubicado en Burghaussen, una pequeña localidad de Alemania, cuyas aguas se encontraban a 3,6°C.
“Me sentí muy cómoda nadando los primeros 1000 metros, pero luego de los 1400 comencé a sentir las consecuencias del frío, por lo que los últimos 200 metros fueron duros” relató.
Ailen fue acompañada en todo momento por dos personas de confianza, que conocen muy bien su comportamiento durante el nado, y por un profesional médico, debido a lo extremo de este desafío. Además, señaló que la recuperación después de nadar tanto tiempo en aguas tan frías es muy difícil, pero que gracias a todos los entrenamientos que realizó, se pudo recuperar rápido y de muy buena manera.
“Sentí una emoción muy grande cuando terminé, una mezcla de alegría, cansancio, y mucha satisfacción , difícil de explicar” comentó orgullosa.
La rionegrina, lejos de relajarse luego de tamaño logro, ya está pensando en Bled, Slovenia, sede del próximo mundial de la International Winter Swiming Association (IWSA), en el cual representará a nuestro país la próxima semana.