Viedma será capital nacional de la avellana

La Cámara de Diputados de la Nación le dio media sanción al proyecto que declara «capital nacional de la producción de avellanas» a la ciudad de Viedma, una iniciativa de la legisladora rionegrina Lorena Matzen. Ahora, se espera la aprobación del Senado para que sea definitiva.

A partir del reconocimiento a Viedma, Matzen intenta una distinción hacia la cuenca de nogales más importante de la Argentina, que aporta el 95% a la producción nacional.

“Este reconocimiento, además de tratarse de una aspiración fundada en los niveles productivos de avellanas de la región, operará favorablemente sobre la visibilización de esta actividad económica que se encuentra en franca expansión, llamando la atención de otros mercados, tanto internos como externos” aseguró Matzen, en referencia a las potencialidades de ésta producción, que ya registra experiencias exitosas y estables de exportación.

En este sentido, el avance de las avellanas viedmenses hacia mercados internacionales es alentador, y en 2018 alcanzó las 330 toneladas de una producción total de 446. Cabe destacar que, a comienzos del siglo, el arribo de la reconocida empresa internacional de confituras Ferrero a Viedma, impulsó exponencialmente el crecimiento de las superficies implantadas.

En la actualidad, son 1.200 las hectáreas de la colonia agrícola del Instituto del Valle Inferior – IdeVI – dedicadas al cultivo de nogales, almendros y avellanos, con unas 2.500 toneladas anuales de producción total de frutos secos, constituyéndose así en la principal cuenca de nogales de la provincia de Río Negro y en el principal polo productor de avellanas del país.

La diputada rionegrina destacó “la tarea intensa del Cluster de Frutos Secos de la Norpatagonia en el camino ininterrumpido de agregado de valor e innovación tecnológica que ha emprendido, tanto para la eficientización de los procesos como para el agregado de valor del producto”. En esta línea, hizo hincapié en la incorporación de tecnología no sólo en la mecanización de la cosecha sino también en los avances en la producción de harinas de los tres frutos y la producción de aceites de nueces y de avellanos, que ya superó la etapa experimental y ahora espera encontrar una escala adecuada para estos aceites gourmet.

“Esta actitud de mejora competitiva permanente y el avance sobre otros rubros que superen la producción primaria, se suma al posicionamiento de los frutos secos rionegrinos en el mercado interno, y dan por resultado una actividad económica con un potencial que merece la atención y el acompañamiento de todas las instancias del Estado” concluyó Matzen.

En una iniciativa paralela, propuso además declarar de interés de la Cámara de Diputados, a la “Fiesta de los Frutos Secos”, que se desarrolla anualmente en esa ciudad capital, para celebrar ésta actividad económica que define su perfil productivo y ofrecer una importante vidriera a los productores de nueces, almendras y avellanas del Valle Inferior del río Negro.

 

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