Proyectan nuevo espacio cultural en la histórica casa de bombeo del Ferrocarril del Sud
La construcción fue recuperada por el municipio y formará parte del patrimonio histórico de la ciudad.
La Municipalidad pondrá en valor la primera casa de bombeo del Ferrocarril del Sud en Neuquén que pasará a funcionar en poco tiempo como un nuevo espacio cultural para talleres de restauración y de producción de obras de arte.
El anuncio lo hizo hoy la secretaria de Cultura y Turismo, Ana Bonet, quien destacó que además este espacio estará abierto a la comunidad, a las escuelas a través de visitas guiadas, y a turistas interesados en conocer parte de la historia viva de la ciudad. El primer paso será la declaración del espacio como patrimonio histórico de la ciudad, proyecto que ya fue presentado en el Concejo Deliberante y está para aprobación de los ediles.
“Es un lugar recuperado por el municipio”, subrayó la funcionaria, y apuntó que además oficiará de “residencia para artistas, para aquellos que no tengan un lugar propio para producir su obra y puedan venir a trabajar en este lugar”.
Acerca de las visitas guiadas a alumnos de establecimientos educativos, explicó que estarán dirigidas a que “entiendan lo que es la restauración, lo que es el patrimonio histórico y esto lo articularemos también con la subsecretaría de Turismo como parte de los recorridos por el patrimonio histórico de la ciudad”.
En el predio de la casa de bombeo del Ferrocarril del Sud hay dos vagones de pinotea originales de la época que también han sido restaurados por la Municipalidad.
Bonet contó que también se puede ver la bomba de agua que antiguamente abastecía los tanques de los ferrocarriles, aclarando que “actualmente hay bombas nuevas que abastecen de agua todo lo que es el Parque Central y el Cenotafio a los Caídos en Malvinas”.
Mencionó, por otro lado, que el lugar fue visitado esta mañana por concejales con la intención de incorporarlo oficialmente como patrimonio histórico de la ciudad.
Ubicada muy cerca del río Limay, a la altura de las calles Bolivia y México, la construcción presenta características típicas de las edificaciones ferroviarias con paredes altas rematadas en cornisa con moldura. Las aberturas son altas con vidrio repartido de perfil de hierro ángulo, tipo vidrio inglés, en tanto que la puerta de ingreso principal consta de dos hojas de madera trabajadas con vidrio.