Mejora en infraestructura y equipamiento para producción agropecuaria en Centenario
Es realizada a través de la cooperativa Manos Unidas con asistencia de la subsecretaría de Producción provincial. La realización implicó una inversión de 1.376.142,03 pesos.
La subsecretaría de Producción comunicó que la Cooperativa Agropecuaria de Vivienda, Consumo y Comercialización Manos Unidas Ltda. está finalizando la ejecución de la iniciativa “mejora de infraestructura y equipamiento para la producción agropecuaria en Centenario”. Esta organización rural constituida en 2011, nuclea a productores del departamento Confluencia, a unos 25 kilómetros de la capital neuquina.
El proyecto fue financiado por el Programa de Desarrollo Rural Incluyente (Proderi) e implicó una inversión de 1.376.142,03 pesos. El proceso de formulación, evaluación, ejecución y rendiciones de lo invertido contó con el acompañamiento coordinado de técnicos de la subsecretaría de Producción y de la subsecretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial de la Secretaría de Agroindustria.
“El objetivo del proyecto fue aumentar la productividad de las actividades agropecuarias que llevan adelante los socios de la Cooperativa, a través de la mejora de infraestructura pero también a través de asistencia técnica especializada y jornadas de capacitación en distintas temáticas. Así se trabajó en la construcción de parideras para cerdos, gallineros y mejoras para la producción hortícola principalmente”, detalló en este marco la subsecretaria de Producción, Amalia Sapag.
La Cooperativa Agropecuaria de Vivienda, Consumo y Comercialización Manos Unidas Ltda. nuclea a productores del departamento Confluencia.
“Dadas las instalaciones precarias con las que se contaba, quedaban expuestos los animales a las adversidades climáticas y a los predadores salvajes o domésticos, entre otras cosas”, dijo Sapag y agregó que por este motivo, “se buscó optimizar los índices productivos pecuarios como el número de lechones destetados y ganancia de peso diario, el porcentaje de mortandad en las distintas etapas y optimizar la conversión alimenticia en todos los casos”.
Herminda Cañuqueo, una de las beneficiarias que vive hace muchos años en el lugar, contó que “será una bendición muy grande para la familia, porque hemos podido finalizar nuestras obras y podemos trabajar y vivir con dignidad. Sacar algo de lo que producimos y venderlo, también utilizarlo para consumo familiar”, finalizó.