El Cippa promueve buenas prácticas de manipulación en carnicerías
El Control de Ingreso de Productos Alimenticios (Cippa) organismo dependiente del ministerio de Producción e Industria ejecutará un programa que tiene como componente fundamental el trabajo de capacitación y educación para los establecimientos que expendan carne.
El objetivo es identificar las problemáticas que se producen en la etapa de almacenamiento y venta al público de productos cárnicos con el fin de asistir en la implementación de diferentes medidas para superar esas dificultades y corregirlas. De esta manera, se apunta a la mejora continua y asistida durante el 2023.
En el primer semestre del año se acompañará a las carnicerías de Neuquén capital, Piedra del Águila, Senillosa y Zapala. En cada localidad se mantendrá una charla informativa de cómo poner en práctica el trabajo y una capacitación en temática de inspección bromatológica para delinear y establecer criterios a aplicar.
Se identificará cada comercio y se evaluará la situación y condición edilicia ( pisos, cielo raso , techo, puertas, ventanas, iluminación, ventilación, vestuarios, etc.) equipos y herramientas de trabajo (utensilios, mobiliarios, equipos de refrigeración, congelación, etc.) personal en el área de producción y manipulación ( indumentaria, aseo personal, hábitos personales, etc.) venta de materia primas y productos a la venta (recepción de materia prima, trazabilidad documental, certificados, etc.) y almacenamiento.
Se desarrollarán distintas etapas para la puesta en marcha del programa. La primera instancia se aplicará en mayo con la sectorización en un mapa de la ciudad, determinando 4 zonas de testeo: Este, Norte, Oeste y Sur. En cada sector se identificarán los comercios expendedores de carnes.
Las carnicerías serán visitadas en un primer encuentro por fiscalizadores del CIPPA, y bromatología, quienes informarán en qué consiste el programa, sus objetivos y modalidades, realizando de esta manera una sensibilización y familiarización del tema. Se indicará que no es obligatorio y no tiene fin sancionatorio. También se indicará que quien participe, complete el programa y demuestre mejoras recibirá el certificado que acredite el programa para exhibirlo en el local.
La segunda etapa será la puesta en marcha del “trabajo de campo”, donde se realizará la inspección y el relevamiento de la carnicería. Este se acreditará a través de un chek list que permitirá clasificar al establecimiento dentro de un grupo de riesgo: alto, moderado o bajo.
Con los resultados del Chek list se dará una ponderación al comercio, identificando los puntos a trabajar: condiciones edilicias, equipos y herramientas, personal en el área de producción y manipulación, venta de materias primas y productos elaborados, etc.
Se dejarán indicaciones y correcciones para aplicar, como así también se asesorará en las buenas prácticas de manipulación de la carne.
Durante la tercera etapa se entregará informe a cada comercio del proceso trabajado y el certificado de participación y cumplimiento en el Programa CIPPA.
Además, se dará un sello de distinción adhesivo de participante para exhibir en la vidriera del local.
En la etapa de cierre e informe final se procesará la información registrada y completará un relevamiento estadístico de los distintos aspectos abordados en el programa.