Banacloy: Gran parte del capital de trabajo se financia con Rusia y hoy está complicado ese mercado
El principal rubro que Argentina comercializa con Rusia son nuestras peras (producidas en Río Negro), el volumen más grande de producción y exportación. Del total de las peras exportadas, el 25% se van al mercado ruso.
Redireccionar esa exportación a otro país ya que no es una operación sencilla por las características particulares del país comprador de una fruta pensada para ese mercado, “es una variedad de pera particular, son categorías que no tienen mercado en otros destinos y no son fáciles de colocar porque tienen calibre diferencial a los que consumen esos otros mercados. Gran parte de esa fruta se comercializa en caliente y con esa exportación se financia gran parte del resto de la temporada frutícola. Gran parte del capital de trabajo se financia con Rusia y hoy está complicado ese mercado”.
Río Negro es uno de los principales productores de peras a nivel mundial, junto a China. “Como exportadores somos los primeros o segundos en el mundo. Más allá de lo comercial netamente, lo logístico también es complicado con el inicio de la guerra ya que los puertos están bloqueados para el arribo de fruta. Los primeros embarques fueron 700 contenedores y partieron antes de la guerra, tardan 35 días en llegar a destino y con los barcos en ultramar comenzó la guerra y el bloqueo de puertos” detalló respecto al complejo escenario para la exportación a uno de los principales compradores de fruta rionegrina.
Pese a la complejidad del mercado de exportación, se establecieron soluciones para evitar el desabastecimiento. “Por un tema humanitario algunas navieras lograron que Europa desbloquee los puertos, ya que el bloqueo de alimentos era injusto y Rusia comenzaba a tener una problemática mayor a la guerra, que era la falta de alimentos”.
Por último, el ministro manifestó que redireccionar los cargamentos con frutas no es una opción, debido a la cadena de protocolos que requiere poner la producción en otros destinos. “La mayoría de los países tienen protocolos particulares, no se puede redireccionar la fruta sin el protocolo previo, lo que hace que no cualquier mercado acepte puntualmente esta fruta producida para Rusia. Lo que se busca es destrabar la situación y la situación económica, ya que Rusia devaluó un 30%. Buscamos que esa fruta llegue a su destino original y tenga la liquidación correspondiente”.