Un histórico club de Roca ya tiene su nueva cancha de fútbol
El club roquense Argentinos del Norte inauguró su nueva cancha de fútbol de césped. El gobernador, Alberto Weretilneck, acompañó a hinchas y dirigentes en esta histórica jornada.
“Para nosotros es una alegría enorme y un orgullo haber acompañado a toda la Comisión Directiva del club. No hay sociedad justa si no es con esfuerzo compartido entre Estado, dirigentes e instituciones”, remarcó el Mandatario.
El Gobernador estuvo acompañado por la presidenta del club, la legisladora Tania Lastra, entre otras autoridades y dirigentes de entidades deportivas de la zona.
El club Argentinos del Norte es uno de los más antiguos de la provincia. Sus orígenes se remontan a fines de la década del 30, cuando la ciudad (por entonces Fuerte General Roca) integraba el territorio de Río Negro y aún no llegaba a 10.000 habitantes.
“Teníamos un gran y difícil tarea por cumplir, que no hubiese sido posible sin el acompañamiento del Estado. Hoy tenemos el orgullo de contar con una de las mejores canchas de la provincia”, resaltó Lastra.
Destacó “la perseverancia” de jugadores y dirigentes como “la base de los buenos resultados que la institución está teniendo” y remarcó: “La gente del club durante muchos años se comió la tierra de la cancha, pero eligió seguir, como hinchas y jugadores”.
Asimismo destacó el trabajo de los clubes como espacios de contención social: “Los chicos que están contenidos en los clubes están al resguardo de los flagelos que acechan a la sociedad”.
“Apostar al deporte hará de nosotros una sociedad más sana”, ratificó Lastra.
Un poco de historia
El club comenzó compitiendo en las ligas independientes, impulsado por un grupo de jóvenes guardia cárceles. El proyecto fue creciendo y tomando forma, y los directores de la cárcel comenzaron a organizar formalmente el club. De allí el mote de “carceleros”.
A comienzos de los ‘40 el club ya era toda una promesa y con un denominador común: todos los jugadores eran argentinos venidos de distintos lugares del país y el Establecimiento Penal estaba al Norte de la ciudad. De allí surge el nombre de la institución, encontrando sus colores azul y granate en el traje de invierno que utilizaban los presos.
Así, el 14 de mayo de 1941 quedó formalizado el nacimiento del club, con su nombre y colores homologados.