El presidente y vocales del STJ abrieron las jornadas de Planificación en el Poder Judicial
Se trata de una fase en la cual participan, estratificados en unidades, las áreas de acceso a justicia.
El presidente del Superior Tribunal de Justicia, Ricardo Apcarián, junto a los vocales del máximo tribunal, Enrique Mansilla, Sergio Barotto, Adriana Zaratiegui y Liliana Piccinini, abrieron hoy la tercera etapa de Planificación Estratégica del Poder Judicial.
Se trata de una fase en la cual participan, estratificados en unidades, las áreas de acceso a justicia.
Tras la apertura, Fabio Quetglas, destacado especialista en la temática de Planificación, dio una charla frente a un auditorio completo. Lo propio hizo el responsable del Centro de Planificación Estratégica del Poder Judicial, Alfredo Bozzetti.
El titular del STJ, Ricardo Apcarián, hizo en principio un repaso por el proceso de planificación, que atravesó distintas presidencias del máximo Tribunal, desde el año 2014 a la fecha. Se inició con el convenio con el Consejo de la Magistratura de CABA, luego hubo un trabajo interno en la búsqueda de fortalezas, debilidades y valores consensuados por parte del STJ, en 2016 se realizó en Bariloche la presentación del primer libro y este año culminó la segunda etapa.
Con las jornadas de hoy, se dio comienzo a la tercera fase. Las áreas que comenzaron hoy su planificación son los Centros Judiciales de Mediación, la Dirección de Métodos Alternativos de Resolución de Conflictos (DIMARC), el Centro de Documentación Jurídica, la Oficina de Género, las Casas de Justicia, las Oficinas de Atención al Ciudadano y las áreas de recepción y orientación de los edificios. El objetivo es que, tras el debate, culminen con objetivos para la mejora de los servicios que se prestan a la ciudadanía. El juez Ricardo Apcarián destacó que “todas son áreas que trabajan de frente a la comunidad, de acceso a justicia”.
Luego adelantó que “el Centro de Planificación está elaborando ahora los indicadores de gestión de la planificación y ejecución, de manera de tener un control y no perder la motivación”. Admitió que “a todos nos cuesta mucho sentarnos a pensar en el largo plazo, lo cual parece razonable en el contexto de un país donde las reglas de juego cambian sin previo aviso, y muchos están preocupados por la coyuntura y descreen de los planes de trabajo a mediano y largo plazo”.
Sin embargo, expuso que “nosotros queremos ser esclavos de nuestros planes, capitalizar el conocimiento de nuestros empleados y trasladarlos a protocolos de trabajo”.
El proceso de planificación
Al referirse al trabajo realizado en las unidades de planificación, el presidente del STJ manifestó que se trató de un “trabajo horizontal” que culminó con al menos “tres proyectos prioritarios” por área.
“Se trabajó también en el Código Procesal Penal. Debió incluirse debido a los plazos que puso la Legislatura para su puesta en marcha. Hemos trabajado muy bien en la Unidad de Implementación”, destacó.
“En función de los pronósticos que hacían algunos respecto a que no iba a funcionar, que iban a estar las oficinas tomadas, estamos satisfechos. Se trabajó muy bien y el Código está funcionando. Siempre hay cuestiones que coordinar, pero son lógicas de un cambio tan drástico de paradigma”, explicó.