Estudiantes de Regina construirán una silla anfibia para que chicos con discapacidad disfruten del balneario

En el C.E.T. N.º 18 de Villa Regina, provincia de Río Negro, los docentes y estudiantes se comprometen contínuamente con los miembros de la comunidad.

Este año, tomaron el desafío de construir una silla anfibia con el objetivo de contribuir a la formación integral de los alumnos y también al desarrollo social de personas con discapacidad. Asimismo, el trabajo busca estimular la cooperación entre los actores dentro y fuera de la comunidad escolar.

El coordinador del proyecto, Cristian Liberatore, explicó que a través de esta labor «se busca crear conciencia y sensibilidad en los alumnos en función de la realidad social en la que estamos inmersos». Además, remarcó que con el desarrollo de esta iniciativa se espera que los alumnos (de 4º, 5º y 6º año) puedan asumir responsabilidad y vuelquen los conocimientos adquiridos en la escuela técnica «en beneficio de quienes más lo necesitan».

La silla anfibia fue un pedido que llegó por medio del Consejo Local para las Personas con Discapacidad de la ciudad. Ese organismo lleva adelante un proyecto que pretende hacer del balneario de la isla 58 un lugar accesible para personas con discapacidad y pidió la colaboración de la escuela técnica para llevar a cabo el prototipo de la silla. «El costo de la silla es muy alto, por eso se acercaron a nosotros en busca de una solución», contó Liberatore.

A lo largo del año, el trabajo se dividió en varias etapas. En este momento, se encuentran en la fase de desarrollo del prototipo. «Nos encontramos gestionando fondos para poder comprar los caños de aluminio que se requieren, la idea es crear el prototipo y una silla final para entregar al Consejo el 3 de diciembre, fecha en la que se hace la apertura de la temporada de verano del balneario», sostuvo Liberatore.

Todos pueden sumar su aporte
Entre los materiales esenciales para la construcción de la silla, se encuentra el aluminio. Es por eso que los estudiantes y docentes pusieron en marcha una campaña de recolección de reposeras en desuso que se podrán utilizar para fabricar el prototipo